ADRA apoya a los refugiados malinenses

Las malas cosechas del año pasado y los combates entre los rebeldes tuareg y los militares en el norte de Malí han obligado a la población civil a huir a países vecinos. Durante meses, los rebeldes y los grupos armados atacaron, saquearon y destruyeron pueblos enteros. En Níger, los refugiados malienses se han asentado en las regiones de Tillaberi y Ouallam de Filingué.

 En la ciudad Ayorou, donde ADRA ha centrado sus acciones para afrontar la crisis, casi 4.500 refugiados viven en campamentos precarios. La mayoría son huérfanos y mujeres. Las condiciones de vida e higiene son deficientes. El agua es muy escasa, careciendo de medios de almacenamiento y extracción. Por otra parte, la falta de saneamiento y la falta de higiene provocan la proliferación de enfermedades como el cólera.